Con la crisis por el Covid-19 muchas personas están obteniendo menos ingresos y por otra parte se aplicó el alivio de deudas, que se los expliqué en un post anterior.
Bueno, luego de tres meses sin pagar las deudas es hora de refinanciar o readecuar. La mayoría de los bancos lo que hicieron es readecuar las deudas capitalizando los intereses. En ese caso, la deuda aumentó y también los plazos o las cuotas.
¿Me conviene refinanciar o readecuar la deuda?
Considero cinco razones válidas para hacerlo, pero toma en cuenta los pro y los contra:
Al negociar el préstamo puedes conseguir pagar menos dinero a cambio de alargar el plazo.
Si consigues que el banco te otorgue una tasa de interés más baja podrías ahorrarte mucho dinero.
Si se tiene la posibilidad de aumentar el pago mensual sería de gran beneficio para salir más rápido de la deuda.
Si se tiene un préstamo con una tasa de interés variable se puede cambiar a una fija y tener más precisión de lo que se va a pagar durante los años del préstamo
Al optar por el refinanciamiento tienes la opción de tener efectivo y reiniciar con un nuevo plan de pagos.
Sino pagaste las cuotas en los últimos tres meses seguramente el banco readecuó la deuda de forma automática, con lo que el monto subió porque tendrás que pagar los intereses de los meses en que se suspendieron los pagos y puede ser que el plazo ahora sea más largo.
La única opción para no hacer refinanciamiento o readecuación de deudas es solicitar la salida del beneficio de la Ley de Alivio de Deuda, pero para eso deberás pagar las cuotas no pagadas en su totalidad. Al hacerlo seguirás con el mismo plan, la misma cuota y el mismo plazo.
Si haces el refinanciamiento lo más inteligente que puedes hacer es que cuando tus ingresos mejoren te comprometas a pagar más al capital para salir de la deuda lo más rápido que puedas.
¡Toma la mejor decisión por tu bienestar financiero!